Arquitectura Acústica Foto Commo

La arquitectura acústica es la ciencia que se encarga de estudiar el control acústico en espacios cerrados y edificios, bien sea para lograr un adecuado aislamiento sonoro entre diferentes recintos o para mejorar el acondicionamiento acústico en el interior de los espacios internos.

Tiene dos ramas: la acústica de edificios y la acústica de salas.

La primera estudia la transmisión del sonido a través de paramentos, puertas y suelos. Mientras que la segunda se centra en cómo se comporta el sonido dentro de una habitación.

Esta ciencia cada vez está ganando más importancia. El 50% de la población está regularmente expuesta a niveles de ruido perjudiciales para la salud. Esto puede provocar molestias y trastornos que pueden afectar a la calidad de vida de las personas. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) identifica el ruido ambiental como el segundo riesgo más importante para la salud medioambiental.

Hay que tener en cuenta que la arquitectura tiene la responsabilidad de ofrecer edificios que sean prácticos y saludables para la sociedad y que tengan en cuenta aspectos como la salubridad sonora para garantizar el bienestar de las personas y evitar la contaminación acústica.

Existe la “Ley del Ruido”, que establece los valores máximos de ruido y vibraciones que pueden ser producidos por las instalaciones del propio edificio, ruido ambiental proveniente del exterior y procedente de actividades que se desarrollan en el mismo edificio y/o en recintos colindantes.

Las soluciones más eficaces para reducir el ruido en edificios:

• Tejados aislantes del ruido: se basan en poner material aislante como lana de roca o espuma de poliuretano y material impermeable adaptándose a la estructura tanto de cubiertas inclinadas como de cubiertas planas.
• Fachadas aislantes: éstas pueden ser fachada ventilada o muro cortina.
• Paredes insonorizadas: éstas pueden ser doble pared o doble hoja cerámica si el proyecto es más complejo.
• Suelo flotante: ayudará a reducir el ruido de pisadas, movimiento de muebles y otras acciones.
• Aislamiento acústico de techos y paredes : se puede hacer sobre falso techo o bajo forjado por medio de PANELES FONO ABSORBENTES.

Teniendo en cuenta estos aspectos, se puede ganar en salud y calidad de vida y disfrutar de una tranquilidad en nuestro hogar que nos permita relajarnos y descansar

La 'acústica' en la arquitectura se relaciona con mejorar la calidad del sonido en los espacios interiores. Aunque es una ciencia compleja, es sencillo de explicar, contiene 2 elementos, la insonorización que equivale a “menos ruido” y el tratamiento a “mejor sonido”.

Los tratamientos de sonido se utilizan cuando se quiere mejorar la calidad del sonido en un espacio: para que los comensales se escuchen unos a otros en un restaurante, para que los estudiantes entiendan a sus profesores o para que toda la audiencia disfrute de la música en un auditorio.

La absorción (menor ruido) se define como el sonido incidente que golpea un material sin reflejarse. Una ventana abierta es un excelente absorbente, ya que los sonidos que pasan a través de ella no se reflejan. Cuanto más fibroso es un material, mejor es la absorción y los materiales más densos son generalmente menos absorbentes. En general, los sonidos de baja frecuencia son muy difíciles de absorber, debido a sus largas longitudes de onda. Sin embargo, somos menos sensibles a este tipo de sonidos, por lo que generalmente no necesitamos tratar una habitación para que absorba este tipo de frecuencias.

La difusión es el método que permite propagar la energía del sonido para mejorar el sonido en un espacio. La difusión expande la energía sonora reflejada en una habitación, lo que también reduce los efectos dañinos del eco y la reverberación. Ejemplo, un difusor es un panel curvo cubierto de tela que se puede colocar fácilmente en paredes y techos. Estos paneles tienen la ventaja de extender uniformemente los reflejos de las paredes planas, que de otro modo se combinarían con las ondas de sonido originales para crear interferencias destructivas. En una sala de conciertos los paneles de difusión se utilizan para mejorar la riqueza del sonido y crear una sensación de amplitud.

Medición
La unidad de medición más conocida es la de los decibelios (dB), una conversación normal ronda los 60 decibeles, 10 dB es lo que emite la respiración normal, 30 dB se refiere a un susurro suave y 50 dB genera a un ruido relajante de lluvia, 85 dB ya es equivalente al ruido de una calle congestionada, 110 dB a un bebé que llora a tu lado y 120 dB a la intensidad de un trueno.